Aunque pueda parecer una broma de mal gusto el hecho es que en efecto Trump ha sido nominado al premio de la Paz por su liderazgo em «la intermediación de los Acuerdos de Abraham, logrando la plena normalización de las relaciones entre Israel y los Emiratos Árabes Unidos y marcando un paso importante hacia un Medio Oriente más pacífico».
En cualquier caso sea elegido no, la gente de «Annals of Improbable Research» se ha adelantadp a los suecos y le acaban de dar, junto a Bolsonaro y otros mandatario más el de Educación en Medicina por haber mostrado a la humanidad cómo pueden influir de forma inmediata sobre la vida y la muerte más que los médicos y los científicos. Muy merecido por sugerencias como inyectarse desinfectante contra el covid-19 o calificar la enfermedad, que ya ha producido casi un millón de muertos en todo el planeta, como una «gripezinha» (gripecita).
Los científicos sin embargo nos quedamos con el de Física que han dado a Ivan Maksymov y Andriy Pototsky por determinar experimentalmente lo que sucede con la forma de una lombriz viva cuando se hace vibrar la lombriz a alta frecuencia.
El premio de entomología es especiamente absurdo. Se lo lleva un estudio estadounidense que reúne pruebas de que, atención, muchos entomólogos (científicos que estudian insectos) temen a las arañas (que no son insectos).
Si tenéis una hora y media libre os recomendamos que os echéis unas risas con el vídeo de la Gala en lo que podéis ver en el minuto 58 y 59 los ganadores de nóbeles anteriores cantando la Cucaracha
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