Lo siento pero cada vez que oido hablar del uso de algas como fuente de energía alternativa al petróleo me acuerdo con un lado a las dificultades para hacerlas crecer a una velocidad rentable que hizo que el proyecto se abandonase en la petrolera y por otro lado la cantidad que teníamos el pasado verano en nuestra piscina del pueblo a la que no pudimos acceder por el tema del COVID… y el próximo tampoco se presenta mejor

Sin embargo, otros no han tirado la toalla tan rápidamente y por ejemplo en Alemania desde el año 2013 tienen en Hamburgo el primer edificio con fachada biorreactiva del mundo, donde los paneles de vidrio cultivan microalgas para producir energía renovable.

Desde entonces, la tecnología ha mejorado significativamente, lo que hace que el sistema de fachada sea una parte integral de un proyecto de construcción que proporciona automáticamente calor y agua caliente.