Cada vez que se produce una nueva noticia sobre «gafas inteligentes» siempre salen a relucir la fallidas Google Glasses y todos los intentos que se han hecho para reducir su precio de forma considerable manteniendo sus posibilidades que no son pocas.

Por ejemplo, ahora estas nuevas de GodView están teniendo un gran éxito en su camapaña de financiación presentándose como las gafas 5K más ligeras del mercado.

Para mí, como miope que soy, la principal ventaja de estas nuevas gafas es que son capaces de «corregir» hasta ocho dioptrías por lo que finalmente podría disfrutar de este tipo de dispositivo cosa que hasta ahora no podía hacer ya que no era cuestión de llevar unas gafas encimas de las de «ver».

El problema, sin embargo, es que teniendo en cuenta que con mis nuevos auriculares Sony con cancelación de ruido me aisla tanto del mundo que no me entero de nada de lo que ocurre alrededor (por ejemplo cuando el repartidor de Amazon aporrea en mi puerta para entregarme algo y finalmente tiene que llamarme por teléfono para que le abra) no quiero ni pensar que pasaría si además pudiese «disfrutar» de una inmersión visual total-