Al preparar esta noticia lo primero que me ha venido a la memoria son los «inventos» de nuestro amigo Creativo que seguro estará inventando cosas muy chulas por sus tierras cordobesas.
Él que en sus años mozos colaboró con la ONCE lanzando nuevos productos (y de los que no salió muy bien parado por temas «políticos») seguro que conoce diversos proyectos sobre bastones inteligentes para mejorar la movilidad de personas con problemas oculares.
Ingenieros de la Universidad de Stanford han intentado mejorar el bastón estándar, que se utiliza para ayudar a las personas con discapacidad visual a moverse de forma independiente y segura.
En un nuevo estudio, su diseño, simplemente llamado bastón aumentado, pareció mejorar la velocidad al caminar y las habilidades de navegación de las personas con deficiencias visuales.
Los científicos dicen que su diseño de código abierto debería facilitar que esta tecnología llegue eventualmente a la comunidad con discapacidad visual.
Los bastones de navegación han sido utilizados durante siglos por algunas personas ciegas y con discapacidad visual.
Pero no fue hasta principios del siglo XX que el bastón blanco (el blanco está destinado a hacer que el bastón sea más fácil de notar para los demás) se convirtió en sinónimo de ayuda visual.
A pesar de esta larga historia, solo un pequeño porcentaje de personas elegibles usa bastones blancos (8%, según una estimación).
Los bastones no son una solución perfecta para detectar obstáculos mientras se camina, incluso después del entrenamiento extenso necesario para usarlos, y existen otros métodos de navegación, como un perro guía, que pueden ser preferidos.
El bastón aumentado tiene dos diferencias importantes con un bastón blanco típico.
Cerca de la base, hay un dispositivo lleno de varios sensores, incluida una cámara, que recopilan información sobre el entorno que rodea a la persona, incluidos datos GPS y LIDAR (LIDAR usa luz láser reflejada para estimar qué tan lejos están otros objetos).
Al pie del bastón, hay una rueda omnidireccional que viene con configuraciones para ajustar la velocidad al caminar de una persona y retroalimentación háptica para empujar al usuario a girar hacia la izquierda o hacia la derecha según sea necesario (el mismo concepto básico se ve en los controladores de videojuegos que vibran en respuesta a las acciones del juego).
En teoría, el dispositivo debería detectar posibles obstáculos por delante y ayudar a navegar por lugares desconocidos.
Para conseguir el mejor diseño de este bastón aparte de incluir desde el primer momento a personas invidentes dando su feedback desde el principio el equipo también subió su diseño a una base de datos de código abierto, lo que significa que ahora otros pueden mejorarlo.
Ya identificaron algunas posibles vías de actualización, siempre que puedan obtener más tiempo y recursos para desarrollarlo aún más.
En particular, su objetivo es hacer que las versiones futuras del bastón sean más ligeras.
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