Tenemos que reconocer que el ORDEN no es una de nuestras virtudes aunque al final siempre en nuestro «desorden» aparente somos capaces de encontrar (tarde o temprano) lo que andamos buscando.

Por ejemplo todavía seguimos buscando «cosas» muy antiguas que teníamos en casa y habíamos dado por perdidas tras la reciente obra que hemos sufrido en casa. Al final estaban tan bien ordenadas que se nos hacía del todo imposible localizarlas en su nueva ubicación.

En cualquier caso no es todo malo ya que siempre te llevas nuevas alegrías al reencontrarte con una cosa olvidada y que pensabas perdida desde hace años. Uno de los últimos hallazgos ha sido el invernadero de Aerogarden que revisamos hace ocho años. Ahora hasta estamos pensando en retomar nuestro pequeño huerto hidropónico y volver a cultivar lechugas y similares en el salón de casa.

El siguiente paso sería reconvertirlo en un huerto inteligente tipo LaGrangette que utiliza tecnología inteligente para monitorear cómo crecen sus plantas.

Gracias al control de crecimiemnto inteligente el sistema aprende, se ajusta y mejora continuamente para crear las mejores condiciones de crecimiento.

A pesar de que no estará disponible, como mínimo, hasta el próximo verano no creo que lo compremos. Me temo que mucha lechuga hay que comprar para amortizar (de alguna manera) los más de 25.000 EUR que te costará el poder comida vegetariana y criada sin ningún tipo de contaminante.