Debo reconocer que mi «contacto» con la bicicleta viene del lado del peatón siempre atento para no ser atropellado por una. Con lo tranquilo que iba uno cuando oía su timbre y se retiraba. Ahora nada, ellos tienen todos los derechos y el peatón es el que se juega la vida para no ser atropellado y más en salidas al monte.

Eso sí, hay que reconocer que ellos se la juegan cuando salen a carretera y más cuando van en compañía hablando despreocupados

Por eso entiendo que existan ya pequeños espejos retrovisores para bicicletas que se instalan en el manillar.

Una solución más moderna y cara aunque al mismo tiempo mejor es el espejo retrovisor que se une de forma magnética … a las gafas del ciclista