Como sin duda sabréis la pasada semana asistimos como invitados al congreso H2 Revolution que tuvo lugar en Puertollano (Ciudad Real) con la presencia de muchos (demasiados) políticos… incluyendo a la actual ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno y antes alcaldesa de Puertollano.  Defendieron que el pueblo manchego está viviendo su tercera revolución energética iniciada con el carbón, luego con el petróleo y ahora (en un futuro cercano) con el hidrógeno a producir aprovechando la energía fotovoltaica.

Una cosa que me llamó mucho la atención fue el interés de muchos de hablar de hidrógeno verde aunque otros preferían denominarla (más correctamente) como hidrógeno RENOVABLE

Hablando de los colores del hidrógeno antes del H2 verde teníamos el hidrógeno gris que se obtiene a partir de combustibles fósiles, como el gas natural y el carbón o el hidrógeno azul que se obtiene también a partir de combustibles fósiles, pero sin liberación de dióxido de carbono (CO2).

Eso era hasta ahora ya que la empresa CEMVITA propone la producción de un H2 oro utilizando microorganismos inyectados en el fondo de pozos de petróleo. Estos microorganismos genéticamente modificados se alimentarían de los restos de petróleo o cualquier producto con carbono produciendo H2 y CO2 … y a un precio muy competitivo  (<1 EUR/kg de H2 frente a los 4-10 EUR/kg que cuesta en la actualidad).

Evidentemente no se trataría de un H2 verde ni uno AZUL por cuanto desprende CO2 para el cual habría que buscar una salida «digna» … por ejemplo, para utilizar en la petroquímica como fuente de carbono

Aunque técnicamente a nivel de laboratorio ya han comprobado la viabilidad del proceso el principal problema para el uso de esta nueva tecnología está en el marco legal para conseguir los permisos necesarios para el uso de microoganismos genéticamente modificados. De todas formas con la crisis energética que estamos empezando a vivir se están empezando a romper mucho tabús y hasta daremos una segunda oportunidad a la Energía Nuclear (esperemos )