Una de las principales ventajas de los SBC (como la Raspberry o cualquiera de los innumerables «cacharritos» que estamos revisando en los últimos años y los que aún nos quedan) es que son «muditos» y tan solo son detectables por el LED que indica su estado. Eso sí esta ventaja de no necesitar de ventilación forzada es gracias a la potencia «limitada» de sus procesadores.

Por ello aunque se sigue ganando en la relación potencia de cálculo / energía consumida / calentamiento del equipo al final en los equipos más potentes sigue siendo imprescindible dotarles de ventiladores. A pesar de las mejoras también en este campo… al final un elemento en rotación como son las aspas de ventilador se oyen

La solución a este problema la presentó la empresa Frore Systems en el pasado CES 2023.

La «magia» de AirJet es una combinación de materiales raros, geometría y física: el chip de 2,8 mm tiene cavidades en la parte superior llenas de membranas vibrantes, que lanzan aire frío a través del disipador de calor que se encuentra debajo, enfriando una CPU u otro componente. A pesar de las minúsculas dimensiones, el AirJet puede enviar partículas de aire individuales a toda velocidad sobre el disipador de calor a una velocidad de hasta 200 kilómetros por hora.

La demostración de CES de AirJet mostró su chip «Mini» empujando aire a través de un ventilador convencional y empujando hacia arriba una pelota de ping-pong de una manera que no se puede negar y, de hecho, puede replicar el poder de enfriamiento de las antiguas aspas giratorias.

De hecho, la contrapresión (la cantidad de fuerza creada por el aire en movimiento) generada por el AirJet es igual a un ventilador de más de diez veces su tamaño. El AirJet también es silencioso y potencialmente a prueba de polvo.