El grafeno es un material muy prometedor para la creación de nuevas fuentes de energía. Debido a sus propiedades únicas, el grafeno es extremadamente resistente y tiene una alta conductividad eléctrica y térmica, lo que lo convierte en un candidato ideal para la generación de energía.
Una de las aplicaciones más prometedoras del grafeno es en la creación de baterías. El grafeno puede ser utilizado como un electrodo en baterías de iones de litio, lo que permite una mayor capacidad de carga y descarga y una vida útil más larga en comparación con los materiales utilizados en la actualidad. Además, el grafeno puede mejorar la eficiencia de las células solares y permitir la producción de energía a partir de la luz solar de manera más efectiva.
Otra aplicación potencial del grafeno es en la creación de supercondensadores. Estos dispositivos pueden almacenar grandes cantidades de energía y liberarla rápidamente, lo que los hace ideales para su uso en vehículos eléctricos y sistemas de energía renovable.
Esto no es más que el principio ya que un equipo de físicos de la Universidad de Arkansas ha desarrollado con éxito un circuito capaz de capturar el movimiento térmico del grafeno y convertirlo en corriente eléctrica.
Los hallazgos, titulados » Corriente inducida por fluctuación del grafeno independiente «, y publicados en la revista Physical Review E , son prueba de una teoría que los físicos desarrollaron hace tres años de que el grafeno independiente, una sola capa de átomos de carbono, se ondula y se retuerce de una manera que es prometedora para la recolección de energía.
La idea de recolectar energía del grafeno es controvertida porque refuta la conocida afirmación del físico Richard Feynman de que el movimiento térmico de los átomos, conocido como movimiento browniano, no puede realizar trabajo. Sin embargo ahora el equipo de Arkansas descubrió que, a temperatura ambiente, el movimiento térmico del grafeno induce una corriente alterna (CA) en un circuito, un logro que se creía imposible.
El equipo también descubrió que el movimiento relativamente lento del grafeno induce corriente en el circuito a bajas frecuencias, lo cual es importante desde una perspectiva tecnológica porque la electrónica funciona de manera más eficiente a frecuencias más bajas.
El siguiente objetivo del equipo es determinar si la corriente continua se puede almacenar en un condensador para su uso posterior, un objetivo que requiere miniaturizar el circuito y modelarlo en una oblea o chip de silicio. Si millones de estos pequeños circuitos pudieran construirse en un chip de 1 milímetro por 1 milímetro, podrían servir como reemplazo de batería de bajo consumo.
Sirve para todo el Grafeno ése y tiene mucho futuro.