Durante el pasado mes y si no recuerdo mal habremos citado temas de computación cuántica al menos en dos ocasiones y siendo la última la apuesta de Europa por la inversión en ésta.

Si bien tenemos claro que todavía queda mucho por desarrollar en este tema las posibilidades que ofrece son inmensas. Por ejemplo, personalmente me gustaría disponer de uno de estos ordenadores para la confección de «digital twins» (gemelos virtuales) para obtener modelos con la máxima predicción basados en modelos rigurosos (y por tanto con elevadas necesidades de computación) ajustados con modelos basados en datos.

Los alemanes de Volkswagen trabajando conjuntamente con D-Wave y Google están estudiando la aplicabilidad de estos ordenadores cuánticos para un problema tan complejo como puede ser la optimización del tráfico en grandes ciudades.

Para el desarrollo del nuevo sistema de modelización del tráfico urbano, los expertos primero trabajan con datos anonimizados de movimiento de los vehículos con datos provenientes de smartphones o de los propios sensores en los vehículos OBD, por ejemplo el Automile Pro que revisamos allá por el año 2014.

Una vez obtenido el mejor modelo, para la etapa de optimización es necesario el uso del ordenador cuántico para conseguir la trayectoria óptima para cada uno de los vehículos a incluir en el proceso. De esta forma se podría por ejemplo mejorar el transporte público de grandes ciudades y, de hecho, está previsto hacer una prueba próximamente en la ciudad de Barcelona.