Si alguien ha pensado que la «demonización» de los vehículos diesel era debida al intento de conseguir respirar un aire más puro en las ciudades… está totalmente equivocado.

Lo que está consiguiendo es que aumenten las matriculaciones de automóviles gasolina. Por lo general, los diésel se caracterizan por emitir más óxidos de nitrógeno (NOx) a la atmósfera. Pero los gasolina expulsan niveles superiores de dióxido de carbono (CO2). Teniendo en cuenta que el Impuesto de Matriculaciones se rige por el CO2, el Gobierno ya ha empezado a sacar tajada de su medida más controvertida… consiguiendo un incremento del Impuesto de Matriculaciones superior al 30%. Por otro lado con el aumento de impuestos del gasoil el gobierno un ingreso extra este año de 670 millones de euros… que ayudará a financiar otras partidas ‘verdes’.

Tampoco los investigadores de la UPV piensan que la política actual de penalización de los diesel sea la más correcta incluso desde el punto de vista de la contaminación ya que cambiar los coches diésel antiguos por otros de gasolina nuevos contaminará más!

Cambiar los vehículos diésel de más de diez años por nuevos de gasolina aumentaría hasta un 2% las emisiones de CO2 en las grandes urbes españolas. En cambio, si la flota diésel española anterior a 2009 se sustituyera por nuevos vehículos diésel (E6 Temp), las emisiones de CO2 en las ciudades bajarían hasta un 6% y un 22% en las carreteras.

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